Decomisan felinos y canguros en domicilios de Hidalgo; advierten vínculo con tráfico ilegal de especies

Durante 2024, la Asociación Hidalguense para la Protección de los Animales A.C. documentó seis casos de felinos hallados en propiedades privadas en los municipios de Tizayuca, Tulancingo y Tula, así como el decomiso de dos canguros que eran mantenidos como mascotas en una vivienda particular de Tula, informó su presidenta, Paola Monterrubio Islas.

La activista advirtió que estos hallazgos podrían estar relacionados con redes de tráfico ilegal de fauna, las cuales en muchos casos operan bajo la protección o control de grupos del crimen organizado.

“El tráfico de especies está íntimamente ligado al crimen organizado”, subrayó Monterrubio.

Tráfico de fauna: una red que trasciende fronteras

Aunque México no cuenta con estadísticas oficiales que relacionen el maltrato animal con la violencia social, los patrones observados sugieren un vínculo directo con actividades criminales.

Monterrubio recordó que el Observatorio de Violencia contra los Animales, con sede en España, ha documentado que las rutas utilizadas para el tráfico de personas, drogas y animales suelen coincidir, aprovechando la infraestructura logística y los contactos del crimen organizado para el traslado de especies entre países.

La mayoría de estos animales son transportados sin permisos oficiales y en condiciones de maltrato, lo que incrementa el riesgo para las especies y la biodiversidad local.


Llamado a no comprar fauna exótica

La presidenta de la asociación exhortó a la ciudadanía a no adquirir animales silvestres como mascotas, ya que cada ejemplar en cautiverio forma parte de una cadena ilegal que inicia con su extracción del hábitat, sigue con su transporte clandestino y termina con su venta en el mercado negro.

Monterrubio enfatizó que la demanda de animales exóticos alimenta el tráfico de especies, un fenómeno que no es exclusivo de Hidalgo, sino un problema de alcance nacional e internacional.