Un lamentable hecho se registró al interior del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Tulancingo, donde un bebé de aproximadamente un año de edad, hijo de una interna, perdió la vida bajo circunstancias que ya son investigadas por las autoridades.
De acuerdo con los primeros reportes, el menor presentó complicaciones de salud y fue trasladado de emergencia a un hospital cercano en un intento por reanimarlo; sin embargo, al llegar al nosocomio, el personal médico confirmó que ya no contaba con signos vitales.
Tras el deceso, autoridades penitenciarias y de salud iniciaron las investigaciones correspondientes para determinar las causas del fallecimiento, así como las condiciones en las que el pequeño permanecía dentro del centro de reclusión.
Hasta el momento, no se han dado a conocer mayores detalles sobre el caso, mientras las instancias competentes continúan con las diligencias para esclarecer los hechos.
