En Apan, sigue la inconformidad por la falta de agua potable. Este lunes, vecinos acudieron a la presidencia municipal para exigir respuestas, pero la alcaldesa Zorayda Robles canceló nuevamente su conferencia semanal, evitando el diálogo.

Los ciudadanos denuncian versiones contradictorias sobre el desabasto: primero una bomba, luego un transformador. Ante la incertidumbre, clausuraron simbólicamente las oficinas de CAAPAN, colocando un cartel de “Clausura Ciudadana” e impidiendo el acceso del personal.

Aclaran que la medida no afectó a otras áreas como Desarrollo Social, que comparte el edificio.

La crisis del agua persiste y la tensión aumenta ante la falta de soluciones claras por parte del gobierno municipal.